La Importancia del Manejo del Inglés
En un mundo cada vez más globalizado y conectado, el dominio de segundos idiomas se ha convertido en una habilidad imprescindible para el desarrollo sostenible de las comunidades.
Uno de los idiomas más relevantes en este sentido es el inglés, que se ha consolidado como la lengua franca de los negocios, la tecnología y la comunicación a nivel mundial.
En un contexto donde la economía global es cada vez más interdependiente, contar con habilidades en inglés se ha vuelto fundamental para la competitividad y el crecimiento de las empresas y las comunidades. Al dominar el inglés, las comunidades pueden participar de manera más activa en la economía, acceder a información técnica y científica de vanguardia, y fortalecer sus lazos con el mundo exterior.
En este sentido, el dominio del inglés se vincula con los objetivos de desarrollo sostenible que hacen referencia al trabajo y la sostenibilidad económica de las comunidades. El Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 8, "Trabajo decente y crecimiento económico", señala la importancia de promover el desarrollo económico sostenible y el empleo digno para todos.
En este sentido, el inglés contribuye a mejorar las habilidades laborales y la empleabilidad de las personas, abriendo nuevas oportunidades y crecimiento profesional. Así como también, ayuda a fomentar la sostenibilidad económica de las comunidades e impulsa la reducción de la pobreza.
El inglés puede contribuir con el ODS número 9 (Industria, innovación e infraestructura), ya que el dominio de este idioma abre las puertas a la adopción de tecnologías avanzadas, la participación en redes de innovación y el acceso a recursos educativos y formativos de vanguardia.
Este idioma también juega un papel clave en la promoción del comercio internacional y la atracción de inversiones extranjeras, elementos fundamentales para el desarrollo económico y la sostenibilidad de las comunidades. Además, facilita la participación en redes empresariales globales, la negociación de acuerdos comerciales y la colaboración en proyectos internacionales.
En esa misma línea, el impacto del bilingüismo es amplio y abarca diferentes aspectos de la vida de las personas. A continuación, se ejemplifican algunos de sus efectos positivos:
Mejora de las habilidades cognitivas: Estudios han demostrado que las personas bilingües tienen una mayor capacidad para resolver problemas, tomar decisiones y realizar tareas que requieren flexibilidad mental. El bilingüismo estimula el cerebro y promueve la plasticidad neuronal, lo que se traduce en un mejor rendimiento cognitivo
Ventajas en el ámbito laboral: El dominio de un segundo idioma, como el inglés, amplía las oportunidades laborales y mejora la empleabilidad. Las empresas valoran a los candidatos bilingües, ya que pueden comunicarse con clientes extranjeros, participar en proyectos internacionales y adaptarse a entornos multiculturales. El bilingüismo también puede conducir a salarios más altos y mayores oportunidades de ascenso.
Conexiones interculturales: Al hablar más de un idioma, se pueden establecer conexiones más profundas con personas de diferentes orígenes, lo que fomenta la diversidad, la inclusión y la tolerancia.
Mejora de la salud cerebral: Estudios han demostrado que el bilingüismo puede retrasar el deterioro cognitivo relacionado con la edad, como el Alzheimer y la demencia. El uso constante de dos idiomas fortalece las conexiones neuronales y promueve la salud cerebral a lo largo de la vida
Mayor apertura a nuevas experiencias: El bilingüismo permite acceder a una amplia gama de recursos culturales, literarios y académicos en diferentes idiomas. Al tener la capacidad de comunicarse en más de un idioma, se pueden explorar nuevas perspectivas, ideas y conocimientos, lo que enriquece la experiencia personal y amplía los horizontes.
Estos son solo algunos ejemplos del impacto positivo del bilingüismo en diferentes aspectos de la vida. El dominio de un segundo idioma, como el inglés, puede abrir puertas a oportunidades laborales, mejorar las habilidades cognitivas y promover la comprensión intercultural. Además, contribuye al desarrollo personal y a la conexión con el mundo globalizado en el que vivimos.
En conclusión, el manejo de segundas lenguas, en particular el inglés, es una herramienta fundamental para el desarrollo sostenible. Por tanto, invertir en la enseñanza y el aprendizaje de este idioma es una inversión en un futuro sostenible y en la construcción de un mundo más inclusivo, equitativo y próspero para todos.